– ¿Estás lista?
– Si.
– Por acá… No, no, no hace falta que te saques nada. Corremos esto, así…
Te voy a poner esta cremita que tiene un poco de anestesia. ¿Fría?
– No, está bien.
– Apagaría el aire acondicionado, pero ya vas a empezar a transpirar. Vas a ver… Igual vamos a hacer rápido.
…
Te cuento lo que va a pasar, para que no te asustes. A algunas personas les provoca una molestia como un ardor, a otras personas les duele más, pero es importante que no te muevas, no hagas movimientos bruscos. Yo te voy a tener fuerte, si te duele mucho, que no podés aguantar, me avisás y paramos un rato pero vamos a tardar más y es preferible que te la banques de un saque. ¿Tenés miedo? ¿No? Mejor… Otra cosa es que vas a ver sangre ¿Te da impresión? Mejor. También depende de cada persona, puede ser apenas o mucha sangre, por lo que me pediste es probable que sea mucha sangre… pero es normal. Si yo veo que es mucha sangre, te aviso y paramos un rato.
– ¿Me voy a ir sangrando?
– No, no, es un ratito. No pasa nada. Si ves que te baja la presión o que te estás por desvanecer me avisás. Siempre me avisás. Y no mires si ves que te impresiona. O el ruido. Vos relajate que yo se hacer estas cosas. Y además soy rápido, en 10/15 minutos vas a estar lista.
Tenía razón. En 10 minutos estaba lista, con un lindísimo tatuaje de un tigre en el brazo izquierdo. Saltando, atrevido.