Muchas veces nos dicen frases que parece que son buena onda, pero son sólo el comienzo de algo espantoso -en silencio-.
Ahí van algunos ejemplos:
Yo te banco a muerte (mientras que eso no me comprometa en nada)
Esa ropa te hace más flaca (porque con todo lo demás parecés una tonina)
Yo te llamo (siempre que esté de muy mal humor o no tenga nada interesante que hacer)
Vos estás re bien (considerando la vida reventada que llevás)
Tu marido/novio/amante es un encanto (y vos una cornuda olímpica)
No quiero amargarte con mis problemas (pero preparate porque ya mismo empiezo a volcar toda la basura en esta charla)
Tenés que cortar con esa relación que te está haciendo mal (era obvio que semejante carozo no podía darte bola en serio)
Justo hoy estoy complicado (y voy a encontrar excusas para días futuros)
Yo lo que quiero es que vos estés bien (pero lejos, muy lejos de mi)
Me doy cuenta de que vos no sos ninguna atorranta (pero voy a hacerte cagar como a una puta y gratis)
Intento que este sea un blog participativo, espero más ejemplos -como siempre-